Evaluación crítica de los métodos y las mediciones utilizados en investigación sobre Seguridad del Paciente en Atención Primaria

La Alianza para la Seguridad del Paciente de la OMS incluye en su página estos días, un resumen de las actividades realizadas en investigación en seguridad del paciente durante este año y un avance de los objetivos para 2010: informes sobre investigación en ambientes con pocos datos o de calidad deficiente, la carga global de la atención insegura o el desarrollo de una guía orientativa para potenciales investigadores.

En el área de trabajo de metodología y mediciones, ha sido publicado un documento específico para Atención Primaria por parte del grupo de trabajo de la Alianza que se encarga de este tema. Tras una exhaustiva revisión sistemática de la literatura desde 1966 hasta 2007, se identificaron 9 estudios retrospectivos, 34 con métodos concurrentes o prospectivos o con un único método y 6 con métodos mixtos siendo el más común, el análisis de informes de notificación de incidentes realizados por profesionales o pacientes. No se ha identificado investigación procedente de países en desarrollo, tampoco estudios basados en revisiones hospitalarias o autopsias y la perspectiva del paciente tiene una pobre representación.

Las estimaciones de incidentes en Atención Primaria están en 0.004-240.0/1000 consultas y un 45-76% de todos los “errores” fueron prevenibles. Muchos estudios incluyeron medidas de la frecuencia relativa de diferentes tipos de incidentes: 26-57% de incidentes incluyeron “errores” diagnósticos; 7-52% incluyeron tratamiento; 13%-47% incluyeron investigaciones; 9%-56% incluyeron errores administrativos; 5%-72% fueron errores de comunicación. El daño de estos incidentes varía entre 1,3 incidentes menores/1000 tratamientos a 4% incidentes que resultan en muerte, 17%-39% que resultan en daño y 70%-76% que tuvieron potencial para dañar.

La revisión pone de manifiesto que la investigación sobre seguridad del paciente en Atención Primaria se encuentra en un estadio incipiente y con esfuerzos centrados más en describir el ambiente de seguridad que en evaluación de intervenciones para su mejora. Identificar y medir los daños debido a los incidentes producidos en el primer nivel asistencial es una necesidad y una oportunidad para la investigación. Previamente, son necesarios esfuerzos para unificar criterios sobre la medición de la seguridad y de los resultados del cuidado inseguro.


Publicado por Carlos Aibar y Marisa Torijano